La mezcla de estilos modernos y antiguos funciona a las mil maravillas. Sin embargo, hay que saber hacer la combinación perfectamente para que no desentone o quede muy recargado. Los muebles modernos le darán el toque funcional que necesitas; algo que mezclado con los muebles antiguos ganarán personalidad y elegancia. La apuesta segura en cualquier estancia.
Después de hablaros de esta curiosa mezcla en diferentes habitaciones del hogar, hoy es el momento de saber hacer la combinación en los muebles del dormitorio. Se convierte en uno de los espacios en los que pasamos más horas porque tenemos que descansar para cargar las pilas. Desde Zumadia, te damos algunas claves de como incluir este coctel de estilo con determinados objetos interesantes.
Muebles modernos y antiguos en el dormitorio
- Mesillas de noche: uno de los juegos más efectivos para mezclar muebles modernos y antiguos está en las mesillas. Elige las dos del mismo tipo en estilo antiguo o incluso pon cada una diferente. Será uno de los primeros lugares en los que la gente se fije cuando entré a tu dormitorio.
- Cabecero: si hay algo que resalta en un dormitorio, es el cabecero. Los cabeceros de corte moderno suelen ser elegantes, pero sin personalidad. Sin embargo, los cabeceros de corte antiguo nos dan todo lo que pedimos. Son elegantes, únicos, diferentes y con una fuerza decorativa que no tienen los vanguardistas.
- Bancos / Baúles: si por ejemplo tienes la iluminación moderna y también la cama, otra opción para mezclar estilos es hacerlo a los pies de la cama. Elige por ejemplo bancos, baúles o arcas que puedas colocar en este lugar para darle un aire único. Este tipo de muebles dan mucho carácter, lo que tu habitación requiere.
- Cómodas: es uno de los muebles que no pueden faltar nunca en un dormitorio. Pueden ser altas y estrechas o bajas y anchas, la elección es tuya. Escoge aquella que se adapte a las dimensiones de tu habitación. Siendo las cómodas antiguas un gran reclamo para aumentar la importancia y la distinción de tu dormitorio.
- Sillón: dale una segunda vida a ese sillón antiguo que no usas, tapizándolo. Si escoges un buen tapizado (como puede ser el terciopelo), crearás un rincón de lectura ideal en tu dormitorio o para usarlo de calzador. Una idea interesante que funcionará si lo mezclas con los muebles modernos adecuados.