Poco a poco continuamos diseccionando cada uno de los muebles clave de nuestro dormitorio antiguo. Si hace semanas os hablábamos del pie de cama, los cabeceros o la iluminación; es el turno de un tipo de mobiliario querido y valorado en esta estancia de la casa: las cómodas antiguas.

Ya os hemos hablado de la capacidad que tienen para adaptarse a cualquier ambiente, pero no de manera concreta en el dormitorio. La elección de una cómoda tendrá que ver sobre todo con el espacio del que dispones y el almacenaje que necesitas. Dará el toque decorativo a la estancia tanto por sí misma, como por los objetos que coloques sobre ella. Desde Zumadia te contamos las características clave saber cómo elegir entre las cómodas antiguas.

Características básicas de las cómodas antiguas

De madera: la madera es el material estrella en la fabricación de mobiliario. En los últimos años han aparecido otros materiales, pero su presencia es fundamental. Aporta belleza, natural y sencillez, convirtiéndose en el material perfecto para cualquier estilo decorativo; también crea ambientes cálidos y funcionales. Es un básico imprescindible cuando hablamos de muebles antiguos.

Cómoda antigua de nogalPuertas o cajones: una de las primeras elecciones que tendrás que tomar respecto a las cómodas antiguas es si quieres cajones o puertas. Hay modelos que combinan puertas y cajones de una manera eficiente. Tienes que tener en cuenta dónde vas a colocarlas y medir el ángulo de apertura de la puerta o cajones. De esta manera nada obstaculizará su apertura, teniendo todo lo que necesitas dentro en un solo vistazo.

Motivos tallados: las cómodas antiguas para el dormitorio pueden convertirse en obras de arte. Además de ser funcionales, tienen una belleza increíble que ayudará a crear un ambiente acogedor y decorativo. Sus frentes o patas talladas y el tono de la madera, son clave para aportar al dormitorio un toque romántico y vintage.

Dos por uno: si tienes un dormitorio lo bastante amplio, puede elegir dos cómodas antiguas en lugar de una. De esta manera no tendrás que compartir espacio con tu pareja y cada uno tendrá su almacenaje propio. Además, crearas una composición atractiva y simétrica con acabados de calidad. Juntas son capaces de crear un conjunto funcional pero también puedes colocar cada una en un lado de la habitación.

Sinfonier: de nuevo el espacio será determinante a la hora de comprar los muebles de tu dormitorio. Si no tienes espacio para dos cómodas iguales, puedes apostar por combinar una cómoda y un sinfonier. No son iguales ya que los sinfonier son mucho más altos y estrechos. Aportan estilismo a la habitación y al tener mayor altura, disponen de más cajones.