Los estilos vintage, rústico, clásico o antiguo son de los más populares hoy en día en la decoración. Si nos centramos en este último encontrarás un estilo versátil y acogedor que se adapta a otras tendencias decorativas sin problema. Si apostamos por un salón antiguo, hay que prestar mucha atención a elementos que lo componen.

En este tipo de lugares tendrás que elegir elementos que nos recuerden al pasado. Salones donde viajarás atrás en el tiempo y se han instalado en nuestra casa para darnos ese aire antiguo que necesitamos. Son muebles y objetos que se catalogan como antigüedades pero que han evolucionado favorablemente. Y como el buen vino se conservan en perfectas condiciones. Para saber cómo decorar tu salón antiguo, solo tienes que prestar atención a los consejos que te damos en Zumadia.

Cómo decorar tu salón antiguo

En tu salón antiguo no pueden faltar los muebles antiguos. Algo fundamental es escoger la madera en su estado natural para vestir esta habitación. También son clave sus formas que pueden ser el reclamo para viajar atrás en el tiempo. Como por ejemplo muebles de estilo provenzal o con sinuosas curvas. Sea de la manera que sea, la madera y la forja no faltarán en tu salón antiguo que encajará a la perfección con otros estilos.

Las flores servirán de gran reclamo en este cuarto. Tanto en su estado más natural en un jarrón como su dibujo o símbolo en estampados. Son de los recursos más utilizados en este tipo de decoración, especialmente al buscar un aire más romántico. Apuesta por jarrones con flores naturales encima de un aparador o cuadros que recreen jardines cubiertos de flores.

Algo que no puede faltar en tu salón antiguo son los recuerdos. No solo hablamos de muebles de otra época, sino también fotografías antiguas. E incluso objetos rescatados, heredados o donados que darán el toque diferente que tu cuarto necesita. Compensa el peso de los muebles de madera con el color de las paredes. Elige un tono suave como el beige o el blanco roto. Para un ambiente más acogedor y romántico puedes decantarte por el verde o el azul muy suave, casi pastel.